jueves, 19 de noviembre de 2009

Un gato trepa a un agente de policía mientras intenta poner una multa

Hola amigos.

Hoy me he levantado muy tarde porque durante la noche no ha dejado de ladrar el perro. Mi mujer, como tomó una pastilla, dormía con la boca abierta. A mí me retumbaban los oídos. Ladrido, ladrido, ladrido, me pongo la almohada en las orejas y aprieto, (ladrido) (ladrido) (ladrido). Me levanto y camino desde mi dormitorio hasta el salón (3 minutos). Rigoletto me mira y devuelve la vista al jardín. Ladra, ladra como si diera órdenes o avisos al césped de mi jardín.


¿Tengo cara de sueño?

Cuando intento hacerle callar deja de ladrar, pero en cuanto me doy la vuelta empieza otra vez. Lo que hago es buscar alguna cosa con que distraerlo y descubro que "Un gato trepa a un agente de policía mientras intenta poner una multa". Los gatos distraen a los perros de cualquier cosa que los obsesione, así que le pongo el vídeo a Rigoletto, pero no le presta atención.

Finalmente me he decidido por coger una píldora de mi mujer y llevármela a la boca.

Cuando me he despertado era muy tarde, más de las tres. Mi mujer había salido hacía un buen rato, y Rigoletto ya no ladraba. Lo curioso es que por más que lo he llamado no he dado con él, pero como era muy tarde y tenía mucho que hacer me he dedicado al trabajo. Es la mejor forma de ordenar la mente.

Así que he leído el guión de la película que me trajo el señor de Ontario y no he comprendido muy bien el argumento. Como firmé el contrato sin prestar atención, ahora tendré que hacer esta película. Espero que paguen bien al menos, pero no he encontrado ninguna cifra en el larguísimo contrato. Si viene escrita con letras, pues ya me enteraré cuando llegue el extracto del banco.

Antes de darme cuenta es de noche. Voy a la nevera y me como 11 tabletas de chocolate y un bidón de leche fresca. Me lavo los dientes y me vuelve a entrar el sueño.

Ahora estoy escribiendo esto, pero me voy ya a dormir.

Un abrazo.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Día tranquilo y una buena noticia: el Ejercito australiano recupera a su perro labrador perdido hace 14 meses en Afganistán

Hola amigos.
Hoy ha sido un día tranquilo. Me he levantado y he ido al baño, donde me lo he pasado muy bien leyendo Mortadelo y Filemón, que aquí se llama Clever & Smart que quiere decir Listo y Listillo. El desayuno ha sido algo frugal (23 cruasanes y 9 litros de batido) porque enseguida venía el señor de Ontario para traerme el guión y hablar de él.

Mientras le escuchaba, he visto que Rigoletto, mi perro, estaba mirando a través de la cristalera del jardín a un punto indeterminado del césped. Me he puesto a pensar que anoche cuando me fui a dormir el perro estaba en la misma posición exactamente, de manera que no he podido escuchar bien lo que me decía el señor de Ontario.
Cuando he querido aplicarme un poco (y me ha costado, porque me entraba la risa pensando en Clever & Smart) el señor de Ontario ya había puesto el contrato encima de la mesa, y por no hacerle un feo lo he firmado. La firma me ha salido muy bien en una copia y en la otra un poco peor, pero no pasa nada porque me he quedado yo con la segunda.
Luego me he ido a correr. He dado 3 vueltas a la finca.
Luego he comido: 42 gambas y un vaso de agua. De postre, 7 melones y 1 sandía. He practicado puntería escupiendo las pepitas y he conseguido partir un mondadientes colocado a 20 metros con una de ellas.
Por la tarde me he aburrido mucho, así que he hablado un rato con mi mujer y he leído la prensa. La noticia que me ha parecido más importante es la que pongo en el título de la entrada: "El Ejercito australiano recupera a su perro labrador perdido hace 14 meses en Afganistán". Se la he enseñado a Rigoletto a ver si se animaba a dejar de mirar el jardín fijamente, pero mientras le hablaba no dejaba de observar algo ahí fuera. Yo no veo nada y además está empezando a oscurecer. Un abrazo.

martes, 17 de noviembre de 2009

Vuelvo pero a otra cosa

A partir de ahora, queridos lectores, os voy a contar cómo va mi vida de Gobernador, Actor y Culturista, siempre desde el cariño. Pero tenéis que invitar a muchos lectores porque soy muy famoso y con poco público me da pereza.
Para empezar, os cuento lo que he hecho hoy:
Esta mañana me he levantado a las siete y he ido a pasear a mi perro por ahí. En el césped de mi finca debía haber algo que a Rigoletto, mi perro, le ha llamado mucho la atención. Se ha puesto a ladrar como un loco y me ha arañado las pantorrillas, así que le he dicho: ¡flat!, y cuando le digo flat se tumba. Sin embargo hoy me no me hacía caso y me miraba como diciendo: ¡mira ahí! ¡mira ahí!
Lo he tenido que meter en casa.
Luego he desayunado.
Luego ha venido un señor de Ontario a hablar conmigo, quería proponerme que hiciera una película con él. Me va a enviar el guión.
Luego he comido: 8 pollos asados, 4 platos de patatas fritas, 16 huevos de gallina, 2 huevos de codorniz, 45 manzanas y un vaso de agua.
He dormido la siesta.
Depués me ha despertado mi mujer y nos hemos ido a pasear.
Ahora estoy escribiendo esto.
Un abrazo.